En la Cámara de Diputados, Arrieta se reunió con los trabajadores de Frigocarne
La cooperativa de Máximo Paz se encuentra sin trabajar desde hace varios meses debido a la suspensión de matrículas por parte de SENASA, que reclama una abultada deuda de casi medio millón de pesos. El diputado inició gestiones para que puedan volver a la faena.
El notable aumento de las tarifas de servicios, y la dificultad de recuperar las matrículas habilitantes (documentos emitidos por el Ministerio de Agroindustria de la Nación) debido a una deuda de 460 mil pesos que reclama SENASA, hace que desde hace varios meses los trabajadores de la cooperativa Cooperativa de Trabajo Frigocarne Máximo Paz Ltda. se encuentren desocupados.
El diputado Gustavo Arrieta recibió el viernes a una delegación de Frigocarne en la Cámara de Diputados, donde se comprometió a intensificar las gestiones que ya comenzó Marisa Fassi para intentar que la cooperativa pueda reabrir sus puertas.
En el encuentro, los trabajadores explicaron que hace dos años pagaban entre 40 y 60 mil pesos mensuales de luz, y actualmente esa cifra supera los 500 mil pesos por mes. Y aseguraron que recibieron una intimación por parte de SENASA donde se exige la cancelación de una deuda en concepto de tasas por una cifra cercana a los 460 mil pesos.
En tanto, según explicó, Arrieta renovó su compromiso y el de la intendenta Fassi de “apoyar a Frigocarne con las herramientas de que dispone para acompañar a las familias damnificadas por esta crítica situación”.
Fassi ya había solicitado mediante nota a la Sub Secretaría de Control Comercial Agropecuario del Ministerio de Agroindustria de la Nación la gestión inmediata de los permisos que permitan que la Cooperativa Frigocarne vuelva a trabajar; gestión a la que ahora se sumó el diputado.
“La situación de Frigocarne afecta sustancialmente a toda la localidad de Máximo Paz. En forma directa a las familias de los 150 trabajadores, que después de 10 años hace 7 meses que no puede trabajar y por lo tanto no perciben ingresos. De manera indirecta perjudica a la estructura comercial de Máximo Paz donde la cooperativa generaba alrededor de 1,5 millones de pesos por mes que se consumían en los comercios de Máximo Paz”, manifestó Arrieta al término de la reunión.
“La situación es totalmente delicada, le pedimos al gobierno nacional que emita los dictámenes correspondientes para de resolver una situación que hoy por hoy es desesperante para los trabajadores de Frigocarne”, agregó.