Arrieta asume el martes y adelantó su voto contra los buitres
Arrieta, en el paseo de los presidentes del Congreso Nacional, donde el martes asumirá como diputado.
De no mediar inconvenientes ni cambios de último momento, el próximo martes se formalizará la asunción de Gustavo Arrieta en la banca de diputado nacional para la que fue electo en el 2013 y a la que accederá tras la renuncia de la ex legisladora Verónica Magario, que en diciembre asumió como intendenta de La Matanza.
Para ello, Arrieta hará uso de la licencia por 180 días que el Concejo Deliberante le otorgó en su cargo de intendente, y el Ejecutivo Municipal quedará provisoriamente en manos de la primera concejal electa, Marisa Fassi.
La asunción de Arrieta como diputado se dará en una sesión que de ninguna forma pasará inadvertida: el martes oficialismo y oposición discutirán en el recinto su posición sobre la derogación de la “Ley Cerrojo”, condición exigida por el juez newyorkino Thomas Griessa para aceptar el acuerdo de la Argentina con los “fondos buitre”.
El oficialismo confía en su capacidad de reunir con aliados el quórum y la mayoría necesarios para aprobar también la autorización de emisión de deuda por 15 mil millones para el pago a los holdouts, intereses y costas.
En este sentido, Arrieta brindó el miércoles una charla en el Concejo Deliberante, donde dejó asentada su posición sobre el tema y adelantó que votará en contra del dictamen favorable conseguido por el macrismo en comisión.
“Esta Ley propuesta por el Gobierno nacional va a condicionar a nuestro hijos y a nuestros nietos. Van a hacerse cargo de la herencia de ese ley quienes todavía no nacieron”, manifestó Arrieta, al tiempo que hizo un repaso de las negociaciones del canje de deuda llevadas a cabo por los gobiernos de Néstor y Cristina Kirchner.
“El proyecto de ley requeriría emitir una deuda de 15 mil millones de dólares para pagar en efectivo a los portadores de la deuda, más U$s 8.000 millones para los servicios de la deuda caídos por el fallo de Griessa y otros U$s 5.000 para devolución de capital a los pools de bancos que le anticiparon fondos al gobierno actual. Vamos a emitir casi 30 mil millones de dólares sin generar inversiones para el país”, fundamentó Arrieta a la hora de justificar su posición contraria al gobierno nacional.
“Argentina debe pagar la deuda, pero aceptar estas negociaciones va a condenar las futuras generaciones del país, retrocediendo económicamente a lo peor de nuestro pasado. Los fondos buitres nos quieren ver de rodillas para que nunca más aparezca un Kirchner en el mundo a imponer límites en las negociaciones. Buscan quebrar a las economías latinoamericanas más fuertes, Brasil y Argentina, porque las pobres economías europeas ya no son negocio”, dijo también el mandatario comunal, en una de sus últimas apariciones públicas antes de convertirse en legislador nacional.