Nito Artaza: “Para mí, el teatro es la vida”

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El humorista y político llega a Cañuelas con Inigualables, acompañado por Carmen Barbieri y el cañuelense Miguel Ángel Cherutti.

Inigualables es un espectáculo que reúne los talentos de tres iconos del teatro revista argentina: Carmen Barbieri, Nito Artaza, y el cañuelense Miguel Ángel Cherutti, lo cual sin duda añade peso sentimental a la llegada del show al Teatro Cañuelas este sábado 4 de noviembre. La dupla Artaza-Cherutti, fieles colaboradores que hace rato no compartían el escenario, se unen por primera vez como dúo a Barbieri, ya que Cherutti trabajo previamente con la actriz y comediante, quien se reencuentra con los escenarios tras dedicarse plenamente a la televisión.

Cada uno de ellos trae su propio sabor al espectáculo, alimentado por sus amplias carreras en los escenarios: Barbieri con su carisma atrapante, Artaza con sus ingeniosos chistes, y Cherutti con su voz capaz de imitar artistas como Fito Paez. En esta ocasión, Nito Artaza se reunió con CañuelasYa para conversar sobre su vínculo con sus coestrellas, la importancia del humor, y su inigualable pasión por el teatro en vivo.

Pasó bastante tiempo desde que la última vez que trabajaste con Miguel Ángel Cherutti, ¿cómo fue volver a los escenarios juntos?

Con Miguel mantenemos siempre la amistad y afecto, ya habíamos trabajado juntos, y el también con Carmen, pero nunca los tres juntos.  Juntarnos con Carmencita fue idea de Giuliano Bacchi, que es hijo de un productor nuestro muy joven, y la verdad que salió un espectáculo que de entrada nomás fue un éxito espectacular en todo el país. Hemos recorrido más de 26 ciudades en todo el país, desde Jujuy hasta Ushuaia, y para mí siempre es un gusto. Nos queremos mucho, y nos conocemos tanto que nos divertimos arriba y abajo del escenario.

¿De dónde sale el título Inigualables?

Bueno, Inigualables se le ocurrió a Giuliano- mis títulos siempre suelen ser más largos y tienen siempre alguna ironía política (risas). Por ejemplo, “Lo que el turco se llevó”, “Nación imposible”, “Cantando bajo la deuda” … pero el productor dice que tienen que ser más cortos los títulos hoy. Es Inigualables porque resulta, a veces, inigualable cuando estamos los tres juntos, en cuanto a risa y experiencia de espectáculo. Carmen, Miguel, y yo hicimos muchos espectáculos de este tipo.

¿Qué es lo que más te gusta de trabajar junto a Carmen y Miguel?

Yo disfruto mucho, porque somos como dos chicos con Miguel (risas), y Carmen es nuestra hermana que nos reta, pero ella también es muy divertida, llena de anécdotas. Juntos nos sale un show que, si bien tiene un guion, es muy improvisado, y el público eso lo siente y se divierte. Es un extracto de los grandes espectáculos que hemos hecho cada uno, y los tres tenemos esa capacidad para estar arriba del escenario.

¿Tenes alguna anécdota con Carmen y Miguel que recuerdes?

Montones. La otra vez, cuando fuimos a Rosario, veníamos caminando los tres, nos íbamos a tomar un taxi y dijimos “no, no”. Subimos un colectivo, y subimos los tres, nos llevó el colectivero hasta el hotel. La gente se sacaba fotos, era muy divertido, porque bueno, es raro ver tres figuras conocidas en un colectivo. En un momento Carmen empezó a decir, “señores pasajeros, vengo a ofrecerles directamente de fábrica…”, sacó una birome y la quería vender (risas). La gente se mataba de risa, creo que se hizo viral. Anécdotas con Carmen tenemos montones, y con Miguel también. Sería interminable ponerme a contar una tras otra, y en realidad yo siempre digo algo que mi mamá puso en su epitafio: “no estoy acá, búsquenme en los recuerdos”. Para el mío, voy a pensar algo que diga algo como “no estoy ahí, sino estoy en las anécdotas”, porque tenemos tantas. Inclusive voy a escribir un libro de anécdotas este año con ese título.

¿Qué te representa el humor hoy en día?

Para mí, es una manera de defenderse de la vida y en la vida. Tener sentido del humor es lo más importante en la vida, porque esta con vos pase lo que pase. Eso lo heredé de mis padres, que tenían mucho sentido del humor, tanto mi papá como mi mamá. Mi mamá me decía, “desdramatiza todo, porque hay cosas más importantes en la vida que lo que te pasa a vos, desdramatiza con el chiste”. Yo salía siempre de chico con algún chiste, imitaba a mi mamá, a mi papá, al intendente del pueblo, como seguramente le pasaba a Miguel también ahí en Cañuelas.

Obviamente tenés una amplia trayectoria en la política, ¿sentís que eso nutre tu forma de hacer humor?

No, arriba del escenario siempre hago únicamente humor, porque si uno hace demasiada ironía, ya se vuelve una cosa agresiva, o da la impresión que se esta tomando partido, y no es gracioso. Lo que hago son más que nada parodias y monólogos, por supuesto de la actualidad. Es más divertido hacerle chistes al poder y a la política, pero también me cargo a mí mismo, porque también fui senador y sigo haciendo política. Considero que la política es una herramienta de cambio, a veces malinterpretada. Uno puede criticar a los políticos, pero no a la política, porque si no criticamos la democracia. Siempre el humor tiene que tener compasión por sobre todas las cosas, porque si no es gracioso.

¿Qué representa el teatro para vos?

Yo siempre le digo a la gente que haga teatro, que lo haga en el jardín de infantes, en la escuela, en los centros de jubilados, en asociaciones civiles, en su casa, que lo bajen de Internet y que lo hagan con sus amigas y amigos. Para mí, el teatro es la vida. Mi mayor actividad es teatral, sobre todo en vivo. El teatro sana y entusiasma, te contiene, te hace volar con la imaginación. Para mí es la felicidad, y les digo a los jóvenes que hacen teatro, sobre todo a aquellos que se preocupan por trascender- viste que el ser humano hoy busca trascender en cualquier actividad… que el éxito es no es ser famoso, sino hacer lo que a uno le gusta. Cuando hago reír a la gente, siento que es la mejor profesión del mundo. Creo que tengo éxito cuando hago teatro nomás, me siento feliz arriba del escenario y por eso le aconsejo a la gente que lo haga siempre.

¿Y qué es lo inigualable del teatro?

He hecho mucha televisión y la radio también es maravillosa como como medio, pero no dejo por nada el teatro. Llevo aproximadamente 40 y pico de años haciendo shows, porque es en vivo. Le agradezco mucho en cada función al público que nos viene a ver, porque hoy están los memes, el celular, y la inteligencia artificial para buscar chistes, pero nada se iguala al vivo. Que la gente salga es toda una ceremonia con siglos de tradición, desde los griegos en adelante, por eso nunca muere, ni siquiera en pandemia. Hasta hicimos teatro en auto en la Rural y funcionó. Fue buenísimo y emocionante. Cuando contábamos el chiste, la gente tocaba bocina como si fuera una risa, y cuando se emocionaban, prendían las luces como si fueran ojos que parpadeaban. Se hizo un código muy especial.

Por Camila Corrales